Cecilia, madre de Alma, estaba en su casa y Sebastián toca la puerta, hermano de Alberto y Damián, enseguida Cecilia va a abrirle la puerta.
CECILIA: (Sonríe) ¡Hijo!, que milagro, pasa.
SEBASTIÁN: Muchas gracias, ¿Cómo ha estado?
CECILIA: Muy bien, pensé que ibas a ir al modelaje de tu sobrina.
SEBASTIÁN: No, no pude ir, estuve ocupado con los asuntos del dispensario, que ni siquiera pude ir a visitar y ahorita ya es muy tarde, mañana iré a visitarlos, ¿Y usted por que no fue?
CECILIA: La verdad no tenia muchas ganas de ir, Octavia ya sabes como es, Alma quiso ir pero para poder ver a sus hijos, espero y los traiga a vivir aquí, me alegran todos los días.
SEBASTIÁN: He venido aquí para acompañarla y no se quede sola, traje una bolsa de pan, espero y me invite un café.
CECILIA: (Sonríe) Por supuesto que si hijo, justamente ahora estoy hirviendo el agua, vamos a la mesa (Cecilia va en busca de unas tazas y Sebastián se va a sentar)
Mientras tanto, los Ugarte, Alma y sus hijos, estaban en el hospital a la espera de que llegara el medico y les diera noticias de Pamela, en ese momento llega el Dr. Rivas.
DR. RIVAS: ¿Los familiares de Pamela Ugarte?
OCTAVIA: ¡Nosotros somos los padres!, díganos doctor, ¿Cómo esta nuestra hija?
ALBERTO: ¿Está bien?, no nos deje con la duda, diga algo.
DR. RIVAS: Si sobrevivió la operación, tuvo serias fracturas en un brazo y una pierna, tiene una contusión en la cabeza por estrellarse en el parabrisas del auto.
OCTAVIA: ¿Podemos verla? (Preocupada)
DR. RIVAS: Por el momento no, se encuentra en terapia intensiva.
ALBERTO: Esta bien, gracias doctor. (El doctor se va)
OCTAVIA: ¿Y si se muere nuestra hija Alberto?
ALBERTO: No pienses en eso ok, ella va a estar bien, despreocúpate.
ALMA: Si Octavia, Pamela ya esta fuera de peligro, solo que ahora va a tener que reposar un cama.
MIRANDA: ¿Quieren un café?
ALMA: Por favor hija. (Sonríe)
OCTAVIA: A nosotros también tráenos por favor.
MIRANDA: Si, enseguida vuelvo.
BRUNO: Debo ir al baño, permítanme.
Damián observa a Bruno fijamente. Bruno se dirige a un pasillo y decide llamar a alguien por teléfono.
BRUNO: Ama, sigue viva. Si, yo me encargo de ella, yo le aviso. (Cuelga el teléfono)
Bruno se dirige a la habitación en donde está Pamela, cierra las cortinas y la asfixia con la almohada. Al salir de la habitación, suena la alarma y los doctores se van a la habitación para revivir a la joven, Octavia y los demás observan a los doctores que estaban corriendo.
DOCTORA: ¿Pero como fue que sucedió esto?, tenemos que salvarla rápido.
OCTAVIA: ¡No!, mi Pamela, ¡No! (Llorando)
ALMA: Todo estará bien, ten fe Octavia.
Los médicos estaban intentando salvar la vida de Pamela, hasta lograron revivirla, era grande la alegría de Octavia al saber que su hija fue salvada, "El Cuervo" fracaso en su plan, de querer matar a Pamela, Bruno le envía un mensaje de texto: "No sirvió de nada, pudieron salvarla".
ALMA: Buenos chicos, hay que irnos, ya es tarde y mi mamá nos está esperando.
DAMIÁN: Espera, ¿Ya te los vas a llevar?
ALMA: Si, se van a dormir en casa de mi mamá y mañana ellos irán por sus cosas. (Octavia estaba observando a Alma y Damián)
DAMIÁN: Ok, entonces hasta luego Alma.
ALMA: Adiós Damián (Ambos se dan un beso en la mejilla, Alma y Miranda se van, Bruno se acerca a Damián)
BRUNO: Mientras yo este aquí, no lo voy a permitir, que te quede claro, buenas noches. (Con voz baja, Damián lo mira serio)
ALBERTO: Octavia, también nosotros tenemos que irnos, fue una noche muy difícil, debes descansar.
OCTAVIA: Si, ya mañana vendré a ver a Pamela, ¿Te vas con nosotros Damián?
DAMIÁN: No gracias, yo me voy a mi casa, dejé sola a Támara y debe estar preocupada.
OCTAVIA: Si, muy preocupada (Sonríe)
Mientras tanto, Támara estaba en casa de Damián, teniendo relaciones sexuales con Ramiro, su amante.
RAMIRO: Dime que eres mía, ¡dímelo!
TAMARA: ¡Ay!, ¡Si!, ¡Soy tuya!, ¡Dame más!
En ese momento de lujuria, llega Damián en su auto.
TAMARA: ¡Oh, no!, mi marido.
RAMIRO: No puede ser, para la otra dile que no sea inoportuno.
TAMARA: ¡Ya callate y escóndete de prisa! (Ramiro se oculta debajo de la cama)
Damián entra y ve a Tamara sentada en el sofá muy nerviosa.
DAMIÁN: Hola mi amor, ¿Y ahora a quien viste? (Le da un beso)
TAMARA: (Sonríe) Hola, a nadie, creí que un extraño se metió, ¿Por que tardaste tanto?
DAMIÁN: Es una larga y extraña historia, mañana te contaré, por quiero darme un baño.
TAMARA: Esta bien, te espero, te voy a dar un rico masaje. (Sonríe)
Damián se desviste y se va al baño, enseguida Ramiro sale de la cama.
TAMARA: La verdad, la pase muy rico contigo, a ver que día lo repetimos. (Ramiro se estaba terminando de vestir)
RAMIRO: Si preciosa, me voy, llámame. (Le da un beso)